¿Cuáles Son Los Colores Primarios?

¡Hola, Artenauta! Hoy te hablamos de un tema que suele generar muchas dudas: ¿cuáles son los colores primarios?

De pequeños nos enseñan que los tres colores primarios son el rojo, el amarillo y el azul y que, a través de la mezcla de estos tres, podemos obtener cualquier otro color, pero no es así; al empezar a hacer mezclas, vemos que no podemos conseguir un morado luminoso, por ejemplo.

Aunque debemos decir que no solo en el caso de los niños, a nivel profesional se sigue utilizando este esquema de tres colores en muchos casos.

El modelo que se basa en el amarillo, rojo y azul como primarios se remonta al siglo XVI, donde Franciscus Aguilonius fue el primero en clasificar los colores en primarios y secundarios. Esta teoría ha sido utilizada por muchos pintores a lo largo de los siglos, pero, a día de hoy, debemos tener en cuenta que, gracias a los avances tecnológicos y científicos, la variedad de tonos con la que contamos en mucho más amplia que en el siglo XVI.

¿Qué diferencias podemos apreciar principalmente a la hora de utilizar magenta o rojo en nuestras mezclas?

Veremos que los colores secundarios que nos proporciona el rojo son mucho más apagados, menos brillantes; lo cual no es raro, si tenemos en cuenta que, según el el rojo sería un color secundario, no primario, obtenido a través de la mezcla de magenta y amarillo. Al quebrar tonos, es decir, al mezclarlos con su complementario, obtendremos tonos quebrados, que se caracterizan por ser bastante apagados.

Algo que debemos tener en cuenta a la hora de hacer nuestras mezclas para pintar es que el rojo quiebra en exceso y el magenta, al revés, da mucha luminosidad. Pero el carmín (hablando de pigmentos) solo quiebra un poquito, lo cual suele sernos beneficioso, porque al final pintamos generalmente con tonos ligeramente quebrados, no con tonos hiper luminosos.

Por esto, podemos decir que el carmín es un buen aliado como primario al pintar, pero para aprender la teoría, usamos el magenta, que nos da colores más luminosos en las mezclas.

En resumen, conseguiremos tonos mucho más brillantes al utilizar magenta que al utilizar rojo, ya que el magenta es un color puro no obtenido a través de la mezcla de otros tonos, mientras que el rojo es el resultado de mezclar amarillo y magenta, por lo que, al mezclarlo con otros colores, es muy fácil quebrarlos. Pero, una vez que ya tenemos clara la Teoría del Color, para pintar, te recomendamos utilizar carmín, para que el resultado sea un tono ni muy quebrado ni demasiado luminoso.

Comprender y asimilar la Teoría del Color es de vital importancia de cara a trabajar la pintura y obtener los resultados deseados, evitando malgastar innecesariamente pigmentos y consiguiendo unos acabados mucho más vibrantes y realistas.

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